Los meses más fríos pueden ser brutales para la piel, resultando en irritación, sequedad y malestar general. El aceite corporal de invierno está especialmente diseñado para remediar estos problemas. Es rico en aceites hidratantes así como en antioxidantes que hacen maravillas no solo alimentando la piel, sino protegiéndola de cualquier factor dañino externo. El uso regular asegurará que los niveles de humedad se controlen adecuadamente, resultando en un aspecto saludable y fresco incluso durante los días más duros del invierno.